Estocolmo Físico

Al borde del precipicio , al final de un laberinto, viendo la luz al otro lado del túnel, así me siento.

Parece que una etapa en mi llega a su fin y una parte de mi se resiste en creerlo porque son demasiadas las veces que se ha roto lo que parecía ya asegurado.

Momento confesión

Los últimos 4 años he estado intentar aprobar una asignatura de primero. No me es fácil de reconocer, pero es así y no por rehuirlo va a ser distinto. He intentado cuanto se me ha ocurrido para aprobar esta asignatura pero parece que nada fue suficiente y me quedo con la sensación de que podría haber estudiado más, debería haber hecho aquel ejercicio adicional...

Pues parece que al final va a pasar, por fin ,al pasado porque aprovechando una opción que da la burocracia “me la pueden aprobar” y ,teniendo en cuenta que debería pagar 1.400€ solo por esta asignatura el año que viene ( como he dicho no es la primera vez que la curso), me aprovecharé ( de hecho ya está hecho y parece que va a ser que sí)

Tener esta asignatura de primero mientras ves que todos o la gran mayoría a tu alrededor tiran adelante, avanzando mientras que tu sigues atrás, lastrado por una asignatura que además ha sido una lacra emocional y anímica importante, hace que te sientas hundido, desanimado e incluso con ganas de abandonar. Aquell@s próximos a mi sabéis a lo que me refiero...

Pero,curiosamente, mis sentimientos son encontrados: ahora que parece que si, que por fin llego al final de esta dura etapa, después de tanto luchar, parece que me van a aprobar la asignatura “sin más” no puedo evitar sentirme derrotado. Una parte de mi siente que no es más que rendirse, coger el camino fácil y no puedo evitar sentirme decepcionado conmigo mismo, porque aunque se que puedo sacármela, que podría haberla aprobado con mi solo esfuerzo parece que no va a ser así y que tengo que usar tretas para aprobarla

Ojo! No es que vaya a renunciar a la compensación curricular porque hay demasiado en juego en mi futuro a corto y medio plazo y son cosas que no solo me afectan a mi, pero es algo que no olvido y aunque no se como ni cuando me resarciré y me demostraré, a mi y a todo el mundo, que puedo hacerlo.

Sabéis porque se nota que he sufrido considerablemente por este asunto? Porque todo apunta a que si, es casi seguro que si, cumplo todos los requisitos y lo único que podía ponerme problemas ya me han dicho que no se tendrá en consideración, incluso me han dicho que “en principio si” pero no me fío, hasta que no tenga el papel que me lo certifica, hasta que vea el 5, APROBADO en mi expediente... no respiraré tranquilo... “ gat escaldat de l'aigua freda fuig” que dicen

Me sorprende que existan estos sentimientos contradictorios pero me hace sentir bien, para mi son como unas “agujetas emocionales” duelen, pero te indican que estás en el camino: a mi esto me dice que me estoy haciendo el tipo de hombre que quiero ser, me hace estar un paso mas cerca de poder responder con voz fuerte y la cabeza alta SI a aquella famosa pregunta de “¿estaría tu yo de 5 años orgulloso de ti?” A mi, me dice que me estoy convirtiendo en un hombre con principios y con al menos cierto

sentido del honor, alguien con cierta tenacidad y cabezonería ( aunque eso último es genético-familiar así que tiene menos merito)

Solo me gustaría ser lo bastante valiente y lo bastante fuerte para poder sacármelo “por mi mismo” pero si mi niño interior está orgulloso de mi, mi adulto interior me dice que sea práctico y tenga paciencia porque tendré mi oportunidad de resarcirme, algún día.

* Mientras este articulo se guarda y cuelga una voz suave resuena en mi cabeza diciendo “ya pasó, ya se acaba” y el escritor rompe a llorar*